Carboxiterapia
¿En qué consiste la carboxiterapia? El dióxido de carbono se infiltra por vía subcutánea, percutánea o intradérmica a través de una aguja muy fina. Esta se conecta a un equipo que permite controlar el flujo y volumen de gas y mantener una presión constante durante el tiempo necesario.
Tras su aplicación se da un ligero masaje en la zona con el fin de facilitar la distribución del dióxido de carbono.